El Programa Nacional de Inclusión deportiva impulsado desde la Subsecretaria de la Juventud del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación está recorriendo barrios del Gran Resistencia, el último sábado 1 de agosto se desarrollo una nueva jornada deportiva enmarcada en el programa nacional, esta vez la sede fue la canchita barrial ubicada en el barrio 131 viviendas continuación del Barrio Valussi donde viven aproximadamente 100 familias
El espacio deportivo donde se realizo el campeonato relámpago es un lugar donde confluyen jóvenes de los diferentes barrios de la zona como ser el Barrio CGT, Barrio Hipólito Irigoyen, 17 de Octubre y 100 viviendas, en esta oportunidad la jornada estuvo coordinada por los vecinos que se dieron cita en el lugar y La Campora Resistencia, estuvieron participando del campeonato 8 equipos masculinos y 3 femeninos, quienes en una segunda etapa participaran de la jornada solidaria de refacción de la canchita.
La jornada arranco por la mañana finalizando en horas de la tarde donde se hicieron entrega de los respectivos trofeos a los dos equipos ganadores y el material deportivo para equipar la canchita barrial, estuvieron presentes en la misma la candidata a diputada nacional por el Frente Para La Victoria Lucila Masin la coordinadora Regional del Programa Johanna Duarte y el candidato al concejo local por el FPV Rodrigo Ocampo quienes resaltaron la importancia de generar este tipo de actividades ya que las mismas sirven como contención a diferentes sectores de juventud que hoy no tienen lugares de recreación en los barrios.
Cabe recordar que el Sin Potreros No Hay Diez nació desde una iniciativa que impulsaba lo que en su momento se llamo la Paritaria Social Juvenil y que planteaba diferentes puntos reivindicativos de la juventud y que luego se convirtió en una política de estado que está siendo llevada adelante desde la Subsecretaria de Juventud Nacional y que tiene por objetivo recuperar y refaccionar diferentes espacios deportivos en los barrios más populosos de todo el País, que los mimos sirvan no solo como un lugar deportivo sino para generar organización territorial y un lugar de pertenencia para los vecinos de los mismos.