Secretaría de Derechos Humanos adhiere e invita a la marcha de Ni Una Menos
La secretaría de Derechos Humanos de la provincia del Chaco, adhiere a la convocatoria a la Marcha Ni Una Menos, e insta a la comunidad a participar de la misma, el 3 de junio en la ciudad de Resistencia a partir de las 17 desde el Mástil Mayor de 9 de julio y Frondizi.
La secretaría acompaña los motivos que generaron la misma “este 3 de junio volvemos a las calles, retomamos los espacios que nos ven morir cada 18 horas para convertirlos en sitios de lucha y de libertad. Nos acuerpamos, nos hacemos manada, y nuestra voz se vuelve grito colectivo, lacerante, ensordecedor para denunciar las violencias que nos matan, y a sus cómplices y hacedores. Marchamos para denunciar que nos siguen matando de todas las formas posibles, y que el femicidio es el resultado ineludible de las violencias históricamente cometidas y naturalizadas contra nosotras”.
“Nos movilizamos contra un Estado cómplice de la violencia que feminiza la pobreza y paga el ajuste neoliberal con nuestra hambre y nuestros cuerpos sangrantes. Nos unimos, porque queremos ser dueñas de nuestros cuerpos y de nuestras decisiones, y no menos vientres, sometidas al mandato patriarcal de la maternidad no deseada y enseñada como único camino posible para nuestra realización. Exigimos el respeto a nuestras orientaciones sexuales y a nuestras identidades diversas, y demandamos al cese de los crímenes de odio contra nuestras hermanas trans, travestis y lesbianas. Nos organizamos para que sea una realidad la implementación de la Educación Sexual Integral en todos los niveles, que se visibilicen las distintas orientaciones e identidades no binarias, porque Ni Una Menos también comienza en la escuela”.
“Gritamos y marchamos por la libertad de Higui, presa por mujer y por lesbiana, acusada de defenderse de una violación grupal correctiva, presa por no dejarse matar, presa por no rendirle culto al patriarcado representado en la penetración, y por la libertad de Milagro Sala, ilegalmente detenida y torturada por el hecho de ser mujer, originaria y combativa. Ambas son víctimas de un entramado heteropatriarcal que no les perdona romper el molde impuesto a nuestro género”.
“Reclamamos y adherimos al lema que plantea Educación Sexual para decidir anticonceptivos para no abortar, aborto legal para no morir, para no lamentar más hermanas desangradas en las mesas mugrientas de un carnicero/a. marchamos por nuestras hermanas originarias, doblemente oprimidas, por mujeres y por pobres, por las mujeres rurales y su derecho a la tierra, al agua y al reconocimiento de su labor en el campo, además de la labor en el hogar”.
“Hartas de la opresión y la invisibilización, indignadas ante la posibilidad de que se nos use como excusa para endurecer penas y criminalizar la pobreza, sublevadas ante los discursos demagógicos de los funcionarios y funcionarias y las sentencias machistas y misóginas que no vuelven a matar, a violar, a golpear, decimos BASTA”.
“MARCHAMOS PARA VIVIR, Y PARA VIVIR EN LIBERTAD, SUJETAS DE DERECHO, DUEÑAS DE NUESTROS CUERPOS Y ESPACIOS”.
Marchamos como somos, heterogéneas, diferentes, plurales; por eso nos vestimos de todos los colores, de todas las maneras, y salimos a la calle por nosotras y las otras que también somos nosotras, pero que ya no pueden marchar porque las han acallado. Como mujeres, identidades femeninas sujetas de derechos, exigimos la presencia de las autoridades correspondientes para recibir el PETITORIO, documento consensuado por identidades femeninas de todos los sectores sociales, políticos, estudiantiles, y que manifiestan nuestras necesidades y demandas. El 3 de junio, a las 17, desde el Mástil Mayor, vos, yo, ella, todas, marchamos para cambiarlo todo”.