Piden informes por contaminación en los ríos Paraná y Uruguay
La Defensoría del Pueblo de la Provincia solicitó datos a Nación y Provincia por posible presencia de glifosato y fósforo en ríos. Ambas sustancias podrían causar daños a trabajadores de la zona o a quienes consumen agua o alimentos derivados de estos torrentes
Se sabe que el uso desmedido de plaguicidas y herbicidas puede tener efectos nocivos en la salud de los seres humanos, además de los efectos contaminantes sobre el ambiente. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la exposición de los humanos se provoca debido al consumo de restos de estas sustancias en los alimentos y, posiblemente, en el agua potable.
En el marco de estas potenciales contraindicaciones es que la Defensoría del Pueblo de la Provincia haya solicitado en los últimos días informes a los gobiernos Provincial y Nacional por la presencia de glifosato en el río Paraná y de fósforo en el río Uruguay.
En comunicación con época, el defensor del Pueblo de la Provincia, César Vallejos Tressens, explicó: “En los últimos días presentamos varias solicitudes de informes a diferentes organismos para tratar de conocer si lo informado sobre la presencia de glifosato o fósforo en ríos tiene implicancia en la salud de la gente. Confiamos en alguna pronta respuesta”.
Glifosato en el Paraná
En 2016, una investigación del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) daba cuenta de que en el río Paraná había presencia de glifosato. “Sabemos que el glifosato es un componente presente en casi todos los herbicidas y que según otros estudios podría tener efectos cancerígenos cuando hay un mayor contacto con la persona, por eso es que nos vimos en la necesidad de averiguar si esto es así o no y en qué medida afecta a nuestra población”, explicó Vallejos Tressens.
Desde la defensoría indicaron que se presentaron solicitudes de informes al Ente Regulador de Agua y Saneamiento (ERAS); a Aguas de Corrientes; al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación y a defensores del pueblo de provincias vecinas como Chaco, Misiones, Santa Fe y de la ciudad de Buenos Aires. También a la delegación argentina de la OMS.
“Hasta el momento desde el único lugar que nos contestaron fue en Aguas de Corrientes. Ellos descartan presencia de glifosato pero hay que ver qué dicen desde los otros órganos”, indicó el defensor del Pueblo. Y remarcó: “Entendemos la fecha en la que estamos, pero esperamos que más tardar a los primeros días de febrero contar con mayores precisiones”.
Fósforo en el Uruguay
Otro de los reclamos que también se han hecho recurrentes en los últimos meses tienen que ver con la presencia de fósforo proveniente de plaguicidas en el río Uruguay, a la altura de Monte Caseros y Bella Unión (Uruguay). Este es más bien un reclamo que la cancillería argentina, a través de la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU) realizó a Brasil por la cantidad de fósforo que arroja al río.
El CARU desarrolla un seguimiento en el que indican que la presencia de este componente se debe a los desechos de agroquímicos de los campos o por las industrias. “El de la presencia de fósforo en el río Uruguay es otro punto de investigación que queremos fortalecer porque puede ser igual o más nocivo que el tema del glifosato en el Paraná”, apuntó Vallejos Tressens.
Asimismo se informó que sin tener proximidad al Uruguay, pobladores de la localidad de Berón de Astrada solicitaron que se corrobore o regule de algún modo el uso de plaguicidas. “Más precisamente vecinos de Yahapé, que es un paraje del departamento, nos indicaron que advertían de alteraciones por mal uso de plaguicidas”, explicó el defensor y aclaró: “A veces cuando se hacen fumigaciones con aviones los plaguicidas terminan afectando a zonas cercanas, o el viento lleva a lugares en los que habitan personas y puede afectar su salud”.
De allí también que hayan planteado la necesidad de solicitar ayuda al Ministerio de Salud Pública de la Provincia. “La idea es poder generar algún tipo de relación entre enfermedades que puedan tener personas que están más en contacto con estos químicos y determinar si es o no causa de ello”, indicó Vallejos Tressens.
Instan a continuar las investigaciones este año
Una investigación publicada en julio por la revista internacional Enviromental Monitoring ad Assessment informaba sobre altos niveles de glifosato en el río Paraná. Según el trabajo esta presencia se visibilizaba en los cursos medio y bajo de los afluentes tributarios, de acuerdo con la agricultura intensiva que se desarrolla en la región.-
Uno de los cuatro investigadores del proyecto, el biólogo Damián Marino, del Centro de Investigaciones del Medio Ambiente (CIMA), que depende de la Universidad Nacional de La Plata, aseguró que no existe un parámetro regulatorio de presencia de glifosato en sedimentos que permita estimar si las cantidades encontradas son excesivas o no. Investigadores que participaron del estudio explicaron que el glifosato y su degradación son contaminantes, y que esta contaminación al río proviene de prácticas agrícolas con cantidades excesivas de herbicidas.
En una asamblea del Consejo Federal de Medio Ambiente, autoridades del Litoral plantearon la necesidad de encarar estudios “permanentes” sobre ambos ríos.