Se recomiendan controles nutricionales a niños con discapacidad
Desde el Ministerio de Salud Pública recomiendan a los padres de niños con discapacidad realizar controles nutricionales para prevenir la obesidad y facilitar su integración a la sociedad.
Para ello, la cartera sanitaria cuenta con un equipo de especialistas abocados a la atención de niños con alteraciones alimentarias, que van desde la desnutrición hasta sobrepeso y obesidad.
En ese marco, Carina Robledo –kinesióloga de Salud Pública- señaló que el 20% de los niños con sobrepeso, padece algún tipo de discapacidad y añadió que los menores con discapacidad tienen una mayor tendencia a sufrir obesidad y que en algunos casos, “la mala nutrición puede afectar más al desarrollo que a la discapacidad en sí misma”.
De las últimas estadísticas realizadas a nivel provincial, se desprende que la obesidad es una de las enfermedades que más aumentó en la población infantil. Del total de los niños que son atendidos por los especialistas, el 50% tienen sobrepeso u obesidad, y un 20% de ellos, son chicos con discapacidad.
Por tal motivo, la Dirección de Kinesiología solicitó la colaboración de la población para disminuir los casos de obesidad en niños, sobre todo si padecen alguna discapacidad. “Las consultas nutricionales en ese grupo de niños es mucho menor que en el resto, porque en general tienen que hacer reiteradas visitas a diferentes especialistas, de acuerdo a la discapacidad que padece el niño, como ser neurólogo, psicólogo y kinesiólogo, y se deja de lado la nutrición del niño”, explicó la integrante del equipo interdisciplinario.
Educación alimentaria
La especialista aseguró que hay pilares básicos para que el sobrepeso no avance en cualquier chico en edad de desarrollo. “Primero, es fundamental la educación alimentaria, no solo al niño sino a toda la familia, porque tiene que existir un acompañamiento y además, la exigencia de que el chico realice alguna actividad física”, señaló.
“El problema se presenta cuando los niños tienen una discapacidad motriz o sindrómica, como puede ser el síndrome de down, genéticos o metabólicos, que afectan el sistema nervioso central, allí es donde se presentan los mayores casos de obesidad”, detalló Robledo.
Trabajo local
“A través del equipo interdisciplinario se trata de llegar a las familias para que se realice la atención a tiempo, porque si llegan a los 18 años con obesidad ya es muy difícil de tratar” comentó.
En la actualidad, se apunta a la prevención de la obesidad en niños con discapacidad y para esto, el Ministerio de Salud busca promover hábitos saludables. “Cuando un niño comienza el tratamiento se necesita el compromiso de la familia, y si la educación, por medio de la consejería, llega a tiempo, se ven muy buenos resultados”, afirmó.
Carina Robledo, en su trabajo como kinesióloga en el equipo interdisciplinario que atiende en forma particular a los niños con mal nutrición contó que se hace mayor foco en los primeros años de vida. “Cuando llega a la atención un niño de 2 años o menos, además de ejercitar la postura y la movilidad, se busca orientar a la persona que lo cuida sobre las medidas de precaución para que el chico pueda desenvolverse con la mayor libertad posible”, remarcó.
Asimismo, Robledo recordó que “el éxito del tratamiento está directamente relacionada a la respuesta que se tenga de la madre, de la familia, si ellos no colaboran nuestro trabajo queda trunco”. Con esta premisa, la profesional pide a los padres que se acerquen a hacer las consultas para que el equipo interdisciplinario pueda asesorarlos teniendo en cuenta el nivel educativo, donde vive, cómo vive, todo eso hay que tener en cuenta para la efectividad del tratamiento”, concluyó.
Proceso de atención
“En general los niños son derivados por su pediatra al Centro de Nutrición y Desarrollo Infantil por desnutrición, talla baja o sobrepeso u obesidad, pero como un chico que tiene una discapacidad neurológica o motriz tiene que hacer tanta consultas con especialistas que en la mayoría de los casos, el nutricionista no es una opción y esto es lo que queremos modificar”, explico Robledo.
El equipo interdisciplinario, que forma parte del Centro de Nutrición y Desarrollo Infantil (CENUDI) de la provincia, brinda su atención en seis servicios sanitarios del área metropolitana de la provincia que “atiende a la población local y también muchos niños del interior del Chaco, que llega con mal nutrición”, detalló.
El equipo de trabajo está integrado por una pediatra especialista en Nutrición, cuatro nutricionistas, una kinesióloga y una enfermera también capacitada en la temática.