El juez Pablo Morán, del Juzgado Federal N° 1, dictó dos años de prisión domiciliaria a tres hombres, que reconocieron haber matado, carneado y comido el animal en julio de 2024. Es la primera vez que un caso de esta índole llega a una instancia de juicio y condena.
Tres personas fueron condenadas a dos años de prisión domiciliaria por cazar un yaguareté en Formosa. Esta es la primera vez que un caso de esta índole llega a una instancia de juicio y condena en Argentina, al tratarse de una especie en peligro de extinción protegida por la ley.
Desde la ONG Red Yaguareté informaron que "la pena es de cumplimiento efectivo" y que "fuimos querellantes el Estado Nacional (Parques Nacionales, con un desempeño también histórico y ejemplar), una provincia (Formosa) y un representante de la sociedad civil (nosotros, la Fundación Red Yaguareté)".
El fallo fue dictado por el juez Pablo Morán del Juzgado Federal N° 1 de Formosa, como resultado del juicio oral y público que se realizó esta semana. Resolvió que tres de los acusados, Walter Hugo Ponce de León (45 años), Viterman Ponce de León (38) y Claudio Cineros (30), sean condenados a dos años de prisión domiciliaria. Mientras que el dueño del campo donde cazaron al animal, Máximo Cisneros, a dos años de prisión en suspenso.
"Nunca antes se había llegado a una instancia de juicio ni se había sancionado penalmente a personas por un ilícito contra un yaguareté, a pesar de la enormidad de casos y de lo que establecen las leyes", añadieron desde Red Yaguareté.
Juicio histórico en Formosa: se conoce el fallo contra cuatro acusados de matar a un yaguareté "Sin dudas que ya esté generando jurisprudencia, es el mayor avance judicial en casos de caza de fauna silvestre protegida", expresó Nicolás Lodeiro Ocampo, fundador y director ejecutivo de la Red Yaguareté, en diálogo con C5N.
Frente a la pena que podrá caer sobre los apuntados, Lodeiro Ocampo aseguró que "la Ley, vieja y obsoleta, prevé hasta 3 años de prisión en suspenso. Si se logra demostrar otros agravantes podría llegar a obtenerse penas de cumplimiento efectivo, que es lo que buscamos".
Al parecer, todo comenzó en un campo ubicado al oeste formoseño, cuando desapareció una vaca lechera del campo de Máximo Cisneros, quien junto a los peones Walter Hugo Ponce de León, Viterman Ponce de León y Claudio Cisneros salieron a buscarla.
Después de un rato de haber emprendido la búsqueda, los hombres hallaron muerta a la vaca y, cerca de sus restos, al yaguareté. Según el relato de uno de los acusados, el animal "nos empezó a atacar y mató dos perros. Los trituró", por lo que Máximo Cisneros lo ejecutó en el acto.
Eso no fue todo, sino que después lo carnearon y comieron en el lugar, los cazadores se tomaron varias fotografías sonriendo junto a los restos del animal y lo despellejaron. En este caso, el proteccionista aclaró que "el ejemplar había sido registrado mediante cámaras de monitoreo, y un yaguareté puede atacar para defenderse si es molestado, como lo fue en este caso por los perros primeros y los hombres luego".