Mapa de la pobreza en el Chaco de Zdero: seis de cada diez asalariados formales ganan menos que una canasta básica
El 61% de los trabajadores privados registrados de la provincia tiene ingresos por debajo de la línea de la CBT, fijada en $1.176.967. El ajuste de Milei que el gobernador convalida políticamente hunde a miles de familias.
En el Chaco, tener un trabajo formal ya no garantiza escapar de la pobreza. Según datos oficiales de la Secretaría de Trabajo de la Nación, el 61% de los trabajadores del sector privado formal en la provincia percibe salarios inferiores al valor de la Canasta Básica Total (CBT), estimada en $1.176.967 para una familia tipo en el Gran Resistencia. La estadística expone una contradicción feroz: empleo formal con sueldos de supervivencia.
El salario promedio bruto en marzo fue de $1.133.806, apenas un 4% por debajo de la CBT. Pero el promedio esconde un cuadro más crudo: el 43,5% de los asalariados formales chaqueños cobra menos de $1.000.000 por mes, reveló un reciente informe de la consultora Politikón.
En ramas como el comercio o los servicios, los ingresos no superan los $700.000. A eso se suma que el 15% del empleo está concentrado en el comercio minorista, uno de los sectores más rezagados.
La política del “sálvese quien pueda” que impulsa Javier Milei desde la Nación y replica Leandro Zdero en la provincia ha desarmado mecanismos de protección social sin proponer ninguna alternativa.
Mientras se achica el sector privado e incluso el Estado expulsa gente, cientos de miles de trabajadores formales deben recurrir a changas, pluriempleo o ingresos familiares combinados para subsistir.
El informe destaca un “rebote estadístico” de salarios en el primer trimestre de 2025, con una suba interanual del 12,4% en términos reales. Sin embargo, si se compara con noviembre de 2023, el poder adquisitivo sigue 5,2% por debajo. Es decir, el tan prometido “crecimiento” es apenas maquillaje numérico.
En un contexto de desregulación laboral, desfinanciamiento estatal y caída de la demanda, la pobreza avanza incluso sobre quienes tienen un empleo registrado. Ni el gobierno provincial ni el nacional muestran señales de revertir esta estructura de desigualdad. Lejos de generar progreso, el modelo actual profundiza la marginalidad en nombre de una libertad que pocos pueden ejercer.
Radiografía de la realidad
Apenas el 3,2% de los trabajadores formales chaqueños del área privada gana más de $2 millones por mes, concentrados en sectores como intermediación financiera, servicios públicos y telecomunicaciones. Otro 2,2% recibe entre $1,5 y $2 millones, vinculados a seguros, informática y química. En cambio, el 33,4% se reparte entre doce ramas con ingresos que apenas superan el costo de una canasta básica total. Así, solo el 39% del empleo formal privado en el Chaco logra superar la línea de pobreza.
El 61% restante está por debajo de esa línea: un 17,7% gana entre $1 millón y $1.176.967, con fuerte peso del comercio minorista (15% del total). Pero lo más grave es que un 43,5% de los trabajadores cobra menos de un millón de pesos, con sectores críticos como la industria del calzado, la silvicultura y agencias de empleo eventual, donde los sueldos promedian menos de $700.000 mensuales. La radiografía laboral chaqueña muestra que la pobreza ya no es solo informal: es formal, registrada y estructural.