Ni Una Menos: Área de Género del Espacio de Peronismo Popular adhiere a la Marcha
#NiUnaMenos es un colectivo que nace con la marcha del mismo nombre del 3 de junio de 2015. En un contexto en el que mataban a una mujer cada 30 horas, es decir, una mujer era asesinada por su sola condición de tal cada un día y 6 horas. A cuatro años, esa cifra no disminuyó y cada año son más las víctimas de femicidios.
El disparador para esta convocatoria fue el femicidio de Chiara Páez, una joven de 14 años que fue asesinada por su novio Manuel Mansilla el 10 de mayo de 2015.
Esta marcha fue un hito en la historia argentina: las mujeres salieron a las calles bajo el lema “ni una menos” a pedir que dejaran de asesinarlas. Lo que pareció ser una convocatoria aislada, se convirtió en el puntapié inicial de la llamada “revolución de las hijas/nietas”.
También puso en discusión la responsabilidad del Estado y del Poder Judicial en la prevención de las violencias hacia las mujeres y niñas, que se han profundizado a través del silencio y distintos métodos de complicidad, la falta de políticas públicas, inversión en áreas de detección de casos, y escasa perspectiva de derechos en los agentes y funcionarios intervinientes.
A 4 años de aquel 3 de junio, queremos reivindicar la lucha de las mujeres argentinas. No solo no ha disminuido el número de femicidios, sino que también han desfinanciado los programas de protección, han quitado sistemáticamente la importancia de las mujeres y las violencias que sufren dentro de la sociedad.
Estamos ante un Gobierno Nacional que no solo nos ignora, sino que nos calla y reprime. Han aprobado un presupuesto 2019 que destinó $11,36 por mujer para los casos de violencia de género, monto que no fue ni siquiera discutido por los gobiernos provinciales que tampoco acompañan la lucha de las mujeres.
En un contexto de pobreza extrema, con altas tasas de desempleo, sin Ministerio de Salud en la Nación, provincias en emergencia económica, aumentos en tarifas y alimentos, las más afectadas somos las mujeres, esto significa un total abandono y vulneración.
Por todo eso, este 3 de junio, exigimos Ley de Emergencia en Violencia de Género, y políticas públicas que realmente incidan y prevengan las muertes de niñas y mujeres.