El movimiento reclamará en un acto “festivo y pacífico”. El gobierno francés anunció que desplegará 147.000 policías y militares para garantizar la seguridad ante esa convocatoria
El movimiento de protesta conocido como Chalecos Amarillos llamó ayer a concentrarse en el paseo de los Campos del Elíseo, en París, para protestar en la noche de fin de año, y el gobierno de Francia anunció que desplegará 147.000 policías y militares para garantizar la seguridad ante esa convocatoria y una “amenaza terrorista”.
Un día después de una jornada de manifestaciones, Chalecos Amarillos convocó a demostrar con un acto “festivo y pacífico” que sus reclamos siguen fuertes. Mediante varios grupos de Facebook y luego de votarlo en asambleas, diferentes grupos del movimiento convocaron para la noche de año nuevo a lo que bautizaron como el Acto VIII, de sus protestas.
“Ni los heridos, ni los muertos ni las detenciones han podido detener el impulso de los Chalecos Amarillos y su deseo de una sociedad más justa y humana”, sostuvo uno de los textos publicados en las redes sociales.
La vocera de uno de los colectivos que integran los chalecos amarillos, Aurore Rudy, adelantó que este Acto VIII no incluirá cortes de ruta ni barricadas en las calles. “Respetamos la voluntad de la población de detener los bloqueos por las fiestas. Han surgido otro tipo de acciones bajo otras formas”, explicó la vocera.
Sin embargo, otros voceros de otros sectores que pertenecen al movimiento no descartaron nuevos cortes de rutas y barricadas en las calles de las principales ciudades del país. En tanto, el Ministerio del Interior informó que desplegará 147.000 agentes de las fuerzas militares, policiales y de seguridad civil para garantizar el orden durante los festejos de Año Nuevo.
“La celebración del nuevo año 2019 se inscribe en un contexto de una amenaza terrorista que sigue siendo elevada y de movimientos reivindicativos no declarados en la vía pública”, dijo el Ministerio del Interior en un comunicado. El último sábado los chalecos amarillos volvieron a salir a las calles como lo hacen todos los sábados, pero esta vez la participación fue muy reducida.
Según fuentes policiales, menos de 20.000 se manifestaron en toda Francia, lo que denota una disminución con respecto a las semanas anteriores: 39.000 manifestantes acudieron a las movilizaciones el pasado sábado, frente a los 66.000 de la semana anterior y los 282.000 de la primera jornada, el 17 de noviembre.
En París, la Prefectura de Policía informó sobre 800 participantes en las protestas y 57 las personas detenidas. Pese a la reducida convocatoria, desde el movimiento aseguraron que las protestas y los reclamos siguen más fuertes que nunca.