Desarrollo Social realizó una jornada de prevención y sensibilización del síndrome de Burnout
La Dirección de la Mujer del Ministerio de Desarrollo Social coordinó un encuentro para la prevención, la contención y la sensibilización sobre el síndrome del Burnout.
El objetivo del encuentro fue proporcionar, a los trabajadores de la Línea137, dispositivos necesarios para evitar mayores riesgos laborales, en especial para evitar los trastornos frecuentes, ya que se desempeñan en un contexto muy estresante abordando casos de personas que padecen el flagelo de la violencia familiar.
De esta manera, la disertación estuvo a cargo de las psicólogas Vita Escardó, Carina Rago y Mariana Scioti, quienes pertenecen al programa Las Víctimas contra las Violencias, del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación. Participaron de la jornada la directora de Mujer Silvina Canteros e integrantes de los equipos técnicos de la Línea 137. Durante la charla-taller se propuso trabajar con mecanismos para mejorar la atención a las víctimas de las violencias y en especial, a partir de la exposición de las diferentes problemáticas laborales a las cuales se enfrentan diariamente. A partir de ello, las disertantes realizaron reflexiones para sensibilizar y concientizar en el modelo de intervención de asistencia a víctimas.
El síndrome de Burnout es un trastorno muy frecuente
Con esta jornada se pretende afianzar los conocimientos y las diferentes técnicas, en cuanto a la atención de personas que sufren distintos episodios violentos desde un modelo teórico impuesto para la intervención. De esta manera se realiza una profilaxis de quienes trabajan en la temática de víctimas de violencia, indicó la directora de Mujer Silvina Canteros.
Síndrome del Burnout
Este síndrome, a grandes rasgos acarrearía padecimientos prolongados de estrés emocional e interpersonal que aparecen en ámbitos laborales, que incluye fatiga crónica, ineficacia y negación de lo ocurrido.
Es por ello que desde la Dirección de la Mujer se llevan adelante este tipo de jornadas para la prevención, la sensibilización y la concienciación de quienes trabajan en la atención y contención de víctimas de violencia de género. Estos espacios permiten establecer parámetros de las labores diarias, por ejemplo de los operadores telefónicos que reciben los casos violentos y de aquellos equipos que intervienen posteriormente en terreno.