Los agentes lo siguieron hasta que arrojó el arma y la motocicleta en que se movilizaba. Sucedió cerca del Puente Tragadero de esa localidad. Además, capturaron a una pareja que intentó llevarse el rodado del sospechoso.
Una comisión de policías de la Comisaría de Colonia Benítez, por poco termina con heridas de arma de fuego, luego de que un joven de la zona, esquivó un control policial y cuando lo siguieron, disparó contra los agentes para poder escapar. Por suerte no hirió a nadie. Una mujer policía tuvo que tirarse al piso para cubrirse. En ese mismo hecho, detuvieron a una pareja que llegó, agredió a los agentes e intentó llevarse la motocicleta que abandono el sospechoso.
Según efectivos policiales que intervinieron, este miércoles cerca de las 19, organizaron un operativo de control general en inmediaciones del Puente Tragadero. A los pocos minutos, vieron que un motociclista se acercaba hacia ellos.
Sin embargo, metros antes de llegar, giró completamente y se alejó. Inmediatamente, la mujer junto a un colega los siguieron en una motocicleta policial. Luego de alejarse varias cuadras y llegar a un campo vecino, el sospechoso perdió el control y cayó. Lejos de detenerse, se levantó y siguió corriendo, a pesar de que los policías no lo perdían de vista y los seguían de cerca.
Sin importarle nada, sorpresivamente, el joven sacó una pistola y disparó contra los policías. La oficial tuvo que hacerse a un lado y tirarse al piso para que los proyectiles no la alcanzaran.
Con la idea fija, apuntó nuevamente hacia el policía que lo seguía, pero esta vez, le sirvió para distraerlo, ya que cuando el funcionario se cubrió, arrojó el arma y aprovechó para escapar en un monte cercano.
Luego de asegurar la zona, secuestraron una motocicleta marca Motomel, negra de 110 centímetros cúbicos, un pistolón calibre 36, con cuatro cartuchos, uno de ellos percutados y en recamara.
CONOCIDOS DEL SOSPECHOSO
Cuando la situación parecía calma, llegó una pareja que intentó llevarse el rodado en que andaba el sujeto en cuestión. Como ambos empezaron a agredir a los uniformados, los detuvieron.
Finalmente, los detenidos, junto a lo incautado, fueron trasladados a la comisaría local, donde establecieron que él tiene 31 años, en tanto su compañera 36. Investigan si son, conocidos del sospechoso.
Ahora programaron nuevos operativos para dar con el muchacho, quien ya está identificado y se sabe que es de la zona. Al respecto, se iniciaron actuaciones judiciales por supuesto abuso de arma y atentado, resistencia y lesiones contra la autoridad.