“Versos al amor”: estrenan producciones de nietos de desaparecidos en el Chaco
Este jueves 30, a las 19 se estrenará la serie audiovisual de cartas y poemas de detenidos y desaparecidos en la voz de sus nietos producida por estudiantes de la U.E.G.P. Nuestra Voz. Será en la Casa por la Memoria, M. T. de Alvear 32, con entrada libre y gratuita.
La Comisión Provincial por la Memoria y Nuestra Voz estrenarán “Versos al amor” una serie audiovisual de cartas leídas por los nietos de personas desaparecidas en dictadura en el Chaco. Contará con la presencia de los hermanos Mauricio Amarilla y Guillermo Amarilla Molfino, nieto restituído en 2009 e hijo de Marcela Molfino y Guillermo Amarilla.
“Versos al amor” es una serie audiovisual de cuatro capítulos basados en cartas que detenidos y desaparecidos chaqueños enviaban a sus familiares. La voz elegida es la de sus nietos y familiares. La producción está realizada por estudiantes y docentes de la U.E.G.P Nº 177 “Nuestra Voz”, escuela de locución y operación junto a la Comisión por la Memoria Chaco y que puede encontrarse en el canal www.youtube.com/@nuestravozchaco .
Además, está prevista una charla con Guillermo Amarilla Molfino, nieto restituido. Es el cuarto hijo de los chaqueños Guillermo Amarilla y Marcela Molfino. Él tenía dudas de su identidad desde la escuela secundaria. En diciembre de 2007 se acercó a la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (CONADI) y se realizó los análisis de ADN, pero debido a que el embarazo de su mamá no había sido denunciado, se le comunicó que su perfil no coincidía con ninguna de las familias que buscaban un nieto.
El 21 de agosto de 2009 se presentó ante la Secretaría de Derechos Humanos una sobreviviente de Campo de Mayo quien relató que Marcela Esther Molfino había dado a luz un niño en ese centro clandestino. Fue así que desde la CONADI se comunicaron con las familias Amarilla y Molfino para informarles y solicitarles sus muestras genéticas, cuya incorporación permitió un nuevo entrecruzamiento y el 30 de octubre de 2009, los resultados confirmaron que el joven era hijo de Guillermo y Marcela. Guillermo pudo así conocer su verdadera identidad y encontrarse con sus hermanos y familiares. Sus padres permanecen desaparecidos.