Duelo provincial por la muerte del artista Moqoit Francisco Ferrer
El gobernador Domingo Peppo decretó este miércoles duelo provincial por el fallecimiento del artista, escultor y docente Francisco Ferrer, vindicador de la herencia de los pueblos originarios de la provincia.
Las banderas nacional y provincial permanecerán a media asta en todos los establecimientos de la provincia los días 22 y 23 de noviembre.
Ferrer inició su actividad plástica en 1980 con una beca de la Subsecretaría de Cultura y se perfeccionó en escultura de madera en Buenos Aires. Su carrera de escultor se desarrolló en simultáneo con su extensa actividad docente y administrativa, como profesor de escultura, jurado en certámenes de la especialidad, inventor en el Instituto del Aborigen Chaqueño y asesor en el Centro Cultural Leopoldo Marechal.
A su vez, realizó seis exposiciones individuales de escultura, 19 exposiciones colectivas en Resistencia, 13 en otras provincias, 15 a nivel nacional y siete en el Centro Cultural General San Martín de Buenos Aires y otros prestigiosos sitios. En 1992 obtuvo el segundo premio en el Encuentro Nacional de Escultura en Madera, realizado en la Plaza 25 de Mayo de Resistencia, por su obra Destrucción del Edén II.
Por tal motivo el Poder Ejecutivo expresa su sentimiento de pesar y destaca los valores íntegros, así como su talento y capacidad con los que logró que sus obras estén en varios museos tanto de Resistencia, como de otras ciudades del país.
PALABRAS DE FRANCISO, EL AÑO PASADO CUANDO SU SALUD COMENZABA A DEBILITARSE
Es solo un hasta pronto
Queridos amigos, me encuentro pasando un tramo difícil de salud, y en estos momentos de reflexión y repaso, puedo afirmar que soy una persona agradecida, bendecida y muy feliz. He tenido la satisfacción de poder caminar junto a hermanos de mi pueblo Moqoit, de otros pueblos indígenas y criollos de mi Chaco y mi país y junto a ellos aprendí, trabajé, luché, cree y logré conquistas y puesta en valor de nuestra rica diversidad cultural.
Agradezco y siento las presencias protectoras y sanadoras de mis hermanas y hermanos, Onesia Reinoso, Santa Pino Fernández, Elida Salteño, Enrique José y de tantos amados ancianos, grandes maestros y sabios de la vida, quienes están hoy conmigo a través de sus enseñanzas, ejemplos y fuerzas espirituales.
Sé que comencé a transitar el camino, que me llevará al encuentro con mis Abuelos… ahora depende de mí, el tiempo en llegar. El hombre tiene un objetivo en la vida y nada puede entorpecer su trayecto, ni cambiar su destino, todo tenía que suceder así como estaba dispuesto.
Por esto quiero hacer público y agradecer especialmente a Patricia, mi compañera de vida, a mi amada e inmensa familia y a todos los amigos, que están colaborando para que pueda por fin sacar a la luz mi nuevo libro: Corazón de Piedra: Relatos Sin Tiempo, una recopilación de relatos transmitidos por mis ancestros, por esos abuelos sabios que me acompañan desde siempre en este recorrido, también incorporo narraciones y dibujos hechos por mí y por Bautista, mi hijo menor y donde busco reflejar vivencias de este fugaz y mágico paso por la tierra, y donde las estrellas siempre alumbraron y apuntalaron el sueño compartido, de ver a nuestro multicolor pueblo chaqueño, unido en las diferencias y en un mítico canto de amistad.
Este libro es una construcción colectiva, que ya lleva quince años de transformaciones, aún hoy le sigo dando forma y modificando a cada paso, porque este escrito tiene vida propia, tiene misterios, tiene poderes y ritmo propio, también contiene espíritus y huellas lejanas a veces difíciles de transmitir, pero también es la síntesis de mis anhelos y del sueño de un mundo de hermanos.
En este momento en que hermosos Shimiagäi’che (picaflores), me visitan para recordarme que el padre bueno me espera de regreso a su lado, solo quiero recordarles que me siento pleno y agradecido de haber tenido la oportunidad de transitar junto a cada uno de ustedes, mis hermanos y bajo el cobijo de nuestra amorosa madre tierra, este mítico viaje. No es una despedida, nos seguiremos viendo y comunicando a través del paisaje sonoro, de sus espíritus, que luego serán símbolos, huellas, formas y colores que seguirán nuestros hijos y que el viento llevará por el mundo entero.
Recuerden es solo un Hasta Pronto. Con afecto.
Francisco Ferrer, un caminante más, en el colorido jardín de la humanidad.