El famoso templo Shaolín, conocido como la meca del kung fu, se encuentra sumergido en un escándalo sexual y además sufre problemas económicos por malversación de fondos
El monasterio, situado en la provincia de Henan, en China central, tiene unos 40 centros culturales Shaolin en todo el mundo encabezados por su director, el monje Shi Yongxin.
Pero además, el maestro Shi, director de esta empresa de varios millones de facturación lucha contra las acusaciones de "múltiples relaciones sexuales", informa el diario británico "The Independent".
"Las acusaciones incluyen denuncias de sobre el maestro Shi, quien tuvo hijos con al menos dos mujeres", reproduce RT noticias.
Pero además, sobre el monje pesa la acusación de malversación de fondos.
Este lunes, la oficina de asuntos religiosos adjunta al gobierno de la ciudad de Dengfeng informó sobre las diferentes denuncias contra el maestro Shi: "Nuestra oficina se toma esto muy en serio y aclarará el asunto rápidamente".
Mientras tanto, un comunicado publicado en la página web del templo refuta las acusaciones, que tilda de "falsos rumores" inventados por personas que tratan de dañar el budismo zen.
Yongxin fue fustigado por intentar convertir el templo y sus famosos monjes guerreros de kung fu en una empresa, para una organización construida a finales del siglo V.
En febrero la organización anunció planes para construir una sucursal de Shaolin por 297 millones de dólares en Australia, que incluiría un templo, un hotel, una academia de kung fu y un campo de golf.